Muy buenas a tod@s!
El 2008 llega a su fin y con él todos los buenos y malos momentos que nos ha traido... Para bien o para mal todo acaba y nos da paso a un nuevo año que esperemos que sea mejor.
Las nostálgias y penas para muchos son las protagonistas de estas fechas, de decir adiós a ese año irrepetible, pero para otros son la alegría de recibir a un nuevo año con la esperanza de que sea mejor.
Las compras de última hora para los famosos y tradicionales reyes magos también son comunes, así como los últimos preparativos para la última noche del año. El estrés y ajetreo que hay en las calles se convierte en algo normal, todo tiene que salir perfecto esa noche porque es especial; es la última noche del 2008 y a la vez la primera del 2009.
Las uvas son las protagonistas indiscutibles de esta noche... Éstas también son conocidas como las uvas de la suerte. La tradición es tomar una uva por cada campanada a las 12 de la noche del 31 de diciembre. Muchos españoles reconocen que sólo comen uvas en nochevieja porque es la tradición. Pero, ¿Por qué comemos uvas en Nochevieja?
Este hecho se viene dando desde los principios de este siglo. Si nos remontamos un poco en la historia, en el 31 de diciembre de 1909 se dice que los cosecheros, gracias a su imaginación, pudieron deshacerse de las sobras de la cosecha de aquella temporada inventando el rito de comer las uvas de la suerte en la última noche del año, tal y como la conocemos hoy en día. Como vemos, esta costumbre es muy exclusiva en nuestro país aunque en muchos otros también se practica (como en Latinoamérica) y no se da por motivos religiosos o culturales, sino más bien, como suele suceder, surgió por intereses económicos.
El caso es que todos los españoles la noche del 31 tienen las uvas preparadas; peladitas y deshuesadas. Listas para engullirlas durante las doce campanadas, porque lo que es saborearlas no da tiempo... En la mayoría de casos se quedan apelotonadas en la boca y en muchas ocasiones han provocado ahogos... Por eso, ¡¡cuidado con las uvas que son peligrosas, no os atragantéis!!
Los anuncios son otros de los protagonistas esta noche, las empresas publicitarias invierten millonadas en que sus anuncios sean retransmitidos durante los últimos minutos del año que despedimos y los primeros minutos del año nuevo. Los beneficios siempre son descomunales y muchísimo mayores porque es el momento clave y todo el mundo los ve.
Las televisiones retransmiten ese momento tan especial... ¡La bienvenida al nuevo año! El escenario siempre es el mismo; La puerta del Sol del centro de Madrid y cada año los presentadores suelen ir variando. El objetivo principal es que todo salga perfecto... Primero vienen los cuartos y después las campanadas, para que salga bien es importantísimo el presentador que es el que nos da las campanadas... Esperemos que en el paso a este 2009 no ocurra lo mismo que ocurrió en 1990 que la presentadora se equivocó y pensó que las campanadas eran los cuartos...
Marisa Naranjo fue la elegida para la retransmisión de las uvas de 1990 y... ¡en qué mal momento! Los españoles que siguieron las campanadas en Tve1 aquel año no las tomaron bien!! Y es que... ¡La presentadora se equivocó y cuando se dió cuenta hizo como si nada... intentó disimular la metedura de pata sin disculparse! Por eso es muy importante la intervención del presentador esa noche... Así que ¡esperemos que vaya lo mejor posible!
¡A pasarlo bien!
¡¡¡Próspero año nuevo!!!
TaNaLi
